FRAP UNA TEMPORADA EN ESPAÑA
Riccardo Gualino
Introducción: Carlo A
Caranci
Editorial: Amargord (Madrid,
2010)
Páginas: 478
Precio: 18 euros
MEMORIA:
UN TESTIMONIO DE LA CLANDESTINIDAD ANTIFRANQUISTA
FERRAN AISA
Ricardo Gualino (Roma,
1941), ha escrito un interesante documento histórico de la lucha antifranquista
en España de los años sesenta y setenta: Frap
una temporada en España (Amargordi, Madrid, 2010). A través de su testimonio
describe los avatares del movimiento estudiantil y de los movimientos políticos
clandestinos. Describe su militancia en el Partido Comunista de España (PCE),
la organización de las células, las reuniones inacabables y las acciones de
propaganda. Todo con el interés de despertar la conciencia del aletargado
pueblo español sumido en el miedo y apolítico a la fuerza. Riccardo Gualino
cuenta su militancia en el PCE, las manipulaciones de la dirección y el control
descarado de los dirigentes, especialmente de Santiago Carrillo. Esta maniobra
del comunismo oficial español motiva que aparezcan diversos grupos comunistas
de diversas tendencias, especialmente maoístas, como el MCE, el PTE, etc. Riccardo
Gualino cuenta su pase al PCE (ML) y su implicación en la lucha subversiva,
hasta ser detenido por la policía española en marzo de 1965 y permanecer en la
cárcel hasta 1968. El autor explica con toda clase de detalle las torturas
físicas y psíquicas en los sótanos de la Dirección General de Policía y los pormenores
de su paso por las cárceles de Carabanchel y Palencia. Nuevamente su testimonio
es importante para saber en qué condiciones estaban las cárceles españolas en
tiempos del tardo franquismo. A su salida de la cárcel es expulsado de España,
regresa a Italia y desde allí se reincorpora a la lucha antifranquista
participando en el más alto nivel de la dirección del PCE (ML) y del FRAP
(Frente Revolucionario Antifascista Popular), organismo creado para convertirse
en agitador de masas. El autor narra sus viajes detrás del telón de acero,
sobre todo a Albania donde los comunistas españoles son bien acogidos. Es
interesante la relación que mantiene el PCE (ML) y el FRAP con un dirigente
socialista histórico, Julio Álvarez del Vayo. Las reuniones del partido en Perpignan,
el anuncio de la lucha armada contra el franquismo y la campaña que siguió a
las detenciones y juicios contra diversos militantes del FRAP a quienes la
fiscalía pedía pena de muerte. Riccardo Gualino narra los esfuerzos hechos para
salvar a los “camaradas” detenidos y la negación del PCE de ceder ninguno de
sus abogados para la defensa de los jóvenes del FRAP. Habla del Juicio Sumarísimo donde los abogados defensores eran expulsados y la sentencia determinada de antemano con penas de muerte. El autor describe la campaña internacional contra el régimen franquista y contra las penas de muerte. Campañas que ya se habían iniciado en 1974 tras la eje .cución del
anarquista catalán Salvador Puig Antich. Finalmente narra la impotencia de
saber que cinco jóvenes (3 del FRAP y 2 de ETA) han sido pasados por las armas.
Riccardo Gualino recuerda aquel 27 de septiembre de 1975 en que fueron
fusilados José Luis Sánchez Bravo, Xosé Humberto Baena, Ramón García Sanz,
Ángel Otaegui y Juan Paredes Manot “Txiqui”. El libro no termina aquí, si no
que continúa narrando el papel del PCE (ML) y describe la alegría por la muerte
de Franco y las ansias de libertad del pueblo español. El papel de los
comunistas durante la transición hasta que se fueron diluyendo en el desencanto.
Las traiciones del PCE del Carrillo con el apoyo de la oposición, especialmente
socialistas y nacionalistas, para pactar con el régimen franquista y, tras
abandonar la idea de la ruptura, diseñar un sistema “democrático” monárquico
con el apoyo del rey impuesto por Franco. En fin, un interesante libro sobre
una época apasionante de la historia de España que, por su clandestinidad, es
poco conocida.
Ferran Aisa-Pàmpols
(Barcelona, 27 de septiembre de 2016)
Fen una ullada per el teu historial , es reflecteix la feina , la il.lusió i l’entusiasme que poses en tot el que fas. Felicitats per a tu i a la Mei , crec que ella ha estat la verdadera musa que t’ajuda’t a no defallir el teu entusiasme
ResponderEliminarRaimunda