Ferran Aisa / entrevistat per Antonio Orihuela (CNT)

ENTREVISTA FERRAN AISA

 

(Ferran Aisa al Bar Horiginal)

Antonio Orihuela

           1.- Ferran, ¿qué fue del movimiento obrero?
 
-.El movimiento obrero al largo de su historia ha vivido en nuestro país cinco o seis momentos de gran efusión, por ejemplo en el siglo XIX en los albores del nacimiento de la Internacional durante el sexenio revolucionario (1868-1874) y posteriormente en los años ochenta con la reorganización de la Federación de Trabajadores y todo el movimiento de debate cultural de los dos certámenes socialistas (1885 en Reus) i 1889 en Barcelona. Durante el siglo XX el movimiento ha mantenido altos y bajos, sus principales focos de movilización hay que buscarlos con el nacimiento de la CNT y la grandes huelgas de 1917 i 1919; luego con la proclamación de la Segunda República y el año 1936 tanto con el triunfo del Frente Popular y la declaración de la amnistía como con el triunfo en las zonas principales de los republicanos con la ayuda fundamental del proletariado que inició una singular revolución popular-libertaria.
A finales del franquismo reapareció en España un movimiento obrero muy combativo que fue anulado por el PCE con su control sobre las Comisiones Obreras. En otro aspecto fue importante la reaparición de la CNT con un crecimiento que se salía de la norma establecida por los diseñadores del nuevo sistema político. En esta transición del franquismo hacia el sistema democrático burgués se combatió con todas las armas al movimiento obrero autónomo y libertario y, con la colaboración de las burocracias sindicales, se desmovilizó al movimiento obrero. Desde entonces todavía no ha resurgido nada que tenga la fuerza suficiente para volver a movilizar-lo y como ya hemos visto en la última huelga general del 29 de setiembre la “movilización” queda sin fundamento al día siguiente, pues la dirección toma un giro y contra los propios trabajadores firma pactos contra natura en nombre de los trabajadores. Y nadie pide responsabilidades, ni dimisiones, ni se rebela…
 
           2.- Ateneismo, bibliotecas obreras, educación laica, deporte no competitivo, teatro, poesía… ¿todo se lo comieron entre el Estado y la sociedad de consumo?
 
-. Todos los Congresos Obreros desde la Primera Internacional hasta los comicios de la CNT discutieron y aprobaron la creación o protección de ateneos, escuelas, cooperativas, bibliotecas, etc. Al inicio del siglo XX, después de la Huelga General de 1902, fue importante el debate generado en la prensa obrera y republicana, pero sobretodo en la libertaria, de la necesidad de dotar al movimiento obrero de vehículos y herramientas culturales propias. De esta manera por ejemplo en Barcelona nació el Ateneo Enciclopédico Popular o se crearon escuelas que seguían el método de Ferrer y Guardia. En esta época es importante el teatro, los elencos tanto de los ateneos como de los sindicatos, pero destacan compañías “profesionales” anarquistas, sobre todo la Agrupación “Vetllades Avenir” que dirige el poeta y dramaturgo Felip Cortiella. Se estrenan obras propias de contenido social o de ética libertaria y se traduce y se interpreta a Ibsen, Mirbeau, Haupmann, Dicenta, Fola Igúrbide, etc… El deporte no competitivo y de fair play forma parte también de la obra creativa del movimiento asociativo obrero y tiene su máximo desarrollo durante la Segunda República con la idea de montar la Olimpiada Popular de Barcelona. Este movimiento cultural popular también fue arrollado por la vorágine de la derrota de las fuerza antifascista en 1939. Rehacer este gran movimiento era cosa de titanes en los años de la transición pues en gran parte las condiciones obreras habían cambiado brutalmente. La deslocalización de las empresas, los nuevos polígonos urbanos, la televisión, el coche, la sociedad de consumo, etc., ayudaron a fragmentar al ciudadano y a descolocarlo. La conciencia obrera de aquellos obreros que montaron las sociedades culturales ha sido mayoritariamente aniquilada. El embrutecimiento materialista nos ha llevado a un mundo donde la cultura ha sido secuestrada por el poder. A pesar de ello desde muchos ámbitos se ha intentado hacer una cultura que, como dijo Machado, estuviese marcada por una consciencia vigilante.
 
              3.- ¿A qué crees que se debe esa relación de amor/odio de los anarquistas con las vanguardias?
 
-. Las vanguardias artísticas y literarias, que nacieron y se desarrollaron entre las dos guerras mundiales, tienen varias tendencias, una es de signo más bien libertario y la otra marcadamente marxista, pero dividida en ortodoxos (stalinistas) y heterodoxos (trotsquistas). El anarquismo organizado se volcó en    esos años sobre todo en potenciar el anarco-sindicalismo y toda la cultura referente a su lucha por la emancipación. Tal vez por esa lucha contra el Capital y el Estado no acabó de sintonizar con los artista que se enfrentaban también al  orden establecido con sus poemas, sus escritos, sus perfomances y sus obras abstractas. Los artistas ácratas lo fueron a nivel individual y la mayoría de ellos     no se afiliaron nunca a la CNT. El dadaísmo, el futurismo, el cubismo, el surrealismo, etc., nacieron con espíritu transgresor aunque la mayoría de ellos acabasen siendo integrados finalmente por el sistema burgués. En el campo libertario tuvo más éxito el realismo artístico y literario, pues se consideraban tendencias más apropiadas para llegar a la clase trabajadora.
 
               4-. ¿Por qué crees que “La Idea” carece hoy de las viejas adhesiones de la intelectualidad de otras épocas? ¿Dónde están hoy los intelectuales y dónde la cultura?
 
-. El pensamiento único que nos han impuesto des del poder mundial no ha hecho otra cosa que socavar los cimientos donde se asentaban las ideologías y  por ende “La Idea”. Des de la caída del muro y del sistema soviético hemos visto como los intelectuales e historiadores del sistema han defendido el fin de las ideologías poniendo en un mismo saco a todas, el fin de la historia y incluso el fin de la utopía. Entonces cualquier Idea que no sea la del poder acaba siendo subversiva, antisistema, por tanto hay que combatirla y denigrarla. La única Idea posible es la que emana del sistema, actualmente, neoliberal capitalista. La libertad y la democracia han sido secuestradas por este ente sin cuerpo ni alma pero omnipresente en nuestras vidas llamado mercado. Pero delante de esta “utopía” neoliberal que ha pretendido vendernos la sociedad del bienestar, nada es imposible, pues el pensamiento humano puede y debe continuar su proceso de liberación y levantar el pensamiento utópico del sueño igualitario y, naturalmente, libertario. 
Si en otros tiempos se hablaba de intelectuales comprometidos en todos los campos ideológicos (incluido el libertario), ahora es múltiple la dificultad para que aparezcan esos intelectuales contestatarios, pues si por una banda los de signo universitario están “corrompidos” por el propio discurso universitario, por la otra los intelectuales ideológicos son suprimidos por los mandarines del     sistema y nunca o casi nunca aparecen en los mass media. ¿Dónde hay hoy en día un intelectual de la talla moral de Albert Camus? Tal vez ahora hemos de citar Chomsky, García Calvo, Onfray, Lipovetsky… El compromiso cultural y el pensamiento utópico es fundamental para salir del atolladero en que los tiempos y el sistema nos han metido.  

                5-. Puestos a sembrar una idea, qué idea sembrarías, ¿qué te gustaría ver germinar y extenderse?

 .- Creo en los valores básicos del anarquismo: solidaridad, apoyo mutuo, autogestión… Éstos valores continúan teniendo por si mismo un gran significado, tan sólo con ellos sería posible levantar la Idea de fraternidad y de libertad del ser humano por encima de fronteras, banderas, etnias y tendencias. 

               6.- ¿A qué crees que puede ser debido esa relación entre los anarquistas y el espiritismo de finales del siglo XIX y principios del siglo XX?

.- En la segunda mitad del siglo XIX aparecieron muchas sociedades de tipo librepensador, masónico, teosófico, pitagórico, espiritista, etc.. En casi todas ellas, por no decir en todas, hay gente que se declara ácrata y que, normalmente, escribe en la prensa libertaria o participa en las actividades del movimiento obrero. Son gente de profesión liberal: periodistas, profesores, pequeños     burgueses, libreros, médicos, arquitectos, ingenieros, escritores, etc. Por ejemplo en una de la sociedades espiritista obreras de Barcelona participaba Gaudí, un personaje realmente genial que en su juventud se relacionaba con masones, libertarios y
librepensadores. De una de éstas tertulias con Farga Pellicer, uno de los directores de la FTRE i del Ateneo Catalán de la Clase Obrera, salió la idea de construir un monumento a Bakunin. Pues este movimiento libre pensador continuó sus actividades durante los primeros años del siglo XX, entre ellos el espiritismo, moda que se extendió al campo libertario hasta la guerra civil. El espiritismo fue tema de debate en publicaciones libertarias como La Revista         Blanca, unos lo consideraban un acto contrario a la ciencia y a la razón, y otros lo defendían manteniendo que era un acto espiritual en contra del materialismo. El espiritismo fue condenado por la Iglesia católica pero defendido por los libres pensadores como un acción más contra el poder de la religión. Los espiritistas     organizaron congresos, publicaron revista y editaron libros. Su ideología negaba la existencia de Dios, pero algunos buscaban raíces en el cristianismo primitivo, creando incluso una sociedad en Barcelona que tenía por lema: “Cristianismo, Anarquismo y Espiritismo”.
Desde nuestra óptica actual resulta difícil de entender, pero hay que hacer el esfuerzo de comprender a unos hombres y mujeres que se estaban planteando construir un nuevo mundo desde propia realidad sin esperar a que llegase el día de la victoria de la revolución.
        
                7.- ¿No crees que es injusto el trato que recibe J. Salvat-Papasseit dentro de la literatura española?
 
.- No sé si el olvido de poetas como Salvat-Papasseit también lo sufren otros     autores clásicos de la lengua catalana como Salvador Espriu, Joan Vinyoli, Agustí Bartra, Pere Quart, Martí Pol o Carles Riba, por decir algunos nombres. Pero el caso de Salvat-Papasseit puede ser más dramático, ¿es conocida su obra por los libertarios españoles? Salvat es un poeta joven, pues murió a los treinta     años, pero no solamente es poeta, si no también autor de emotivas prosas revolucionarias de un gran valor actual. Su libro Humo de fábrica, publicado en 1918 con el pseudónimo de Gorkiano, es esencial para conocer la lucha del movimiento obrero por su dignificación y su concienciación. Salvat es un autor proletario, hijo de familia humilde, educado en el Asilo Naval, aprendiz de mil     oficios y finalmente librero. Salvat es autodidacta formado culturalmente en el Ateneo Enciclopédico Popular y en las luchas de la calle. A pesar de su muerte temprana nos legó sus manifiestos de vanguardia, sus caligramas, su poesía romántica, su poesía pura… Su obra poética consta de seis libros en los que canta la vida, la gente de su barrio, los oficios, la belleza de las chicas, el mar, el puerto, su tierra… Murió joven como Miguel Hernández, pero mientras éste tuvo la capacidad publicitaria del Partido Comunista, Salvat, ácrata catalanista e independiente, no tuvo la ayuda de nadie y menos de los mandarines literarios del “noucentisme” catalán. A partir de los años resucitó otra vez su espíritu combativo en la voz de los trovadores de la Nova Cançó: Serrat, Llach, Montllor, Ribalta… Se editaron de nuevo sus obras, se hicieron recitales poéticos, aparecieron estudios…, pero Salvat-Papasseit continua sin entrar en el canon ni catalán ni español. A pesar de ello, Salvat es el poeta más popular y más querido por la generación de catalanes de la transición. Ahora el poeta del     pueblo ha sido objeto de una gran exposición en Barcelona y su obra poética ha sido traducida al castellano, por tanto, es una buena ocasión para buscar el libro y leer sus poemas.   
 
                  8.- Qué es y dónde está hoy la poesía de combate en España. ¿Podrías dar     nombres o libros donde encontrarla?
 
.- Creo que esta pregunta podría responderla tu mismo, ya que eres uno de los poetas de combate en España. Hace unos meses que he publicado el libro Poetas en tiempo de revuelta, en donde hablo del movimiento cultural, literario y poético durante la guerra civil en Barcelona. Es importante saber que la poesía fue un arma cultural de primera mano tanto para expresar sentimientos como para defender la Idea o la causa. El ensayo abarca todo el movimiento poético que hubo en la Barcelona revolucionaria: los homenajes a García Lorca, los mítines poéticos, la conferencia poética de     León Felipe, los recitales de poesía de guerra, los combates poéticos en la prensa, los grupos de rapsodas y de poetas recorriendo trincheras y hospitales, las poetas mujeres libres, etc. La poesía fue una parte fundamental de aquella guerra-revolución. Los teatros se llenaban hasta la bandera ya en los últimos tiempos de la República para escuchar a Lorca recitar a los obreros catalanes o ya en plena guerra los recitales de Alberti en el Gran Price o de León Felipe en el teatro Coliseum llenos a rebozar de apasionados obreros antifascistas. La poesía de combate actual de   haberla hay la pero muy escondida en los márgenes de la sociedad.
 
                  9.- ¿Dali libertario, qué piensas?
 
Los artistas en general tienen un gran sentido de la rebeldía y en muchos casos una gran dosis de anarquismo en su obra y en su propia vida. Dalí es un personaje peculiar que vivió momentos de rebeldía y de anarquismo, que lo llevaron a convertirlo en un gran artista. En su juventud se alió en grupos revolucionarios y participó en actividades antimonárquicas. Por tal motivo fue detenido, juzgado y encarcelado. Luego con su Manifiesto Amarillo puso patas arriba el “seny” catalán y fue “excomulgado” de Catalunya y tuvo que triunfar en París. En los años treinta hizo conferencias provocativas en los ateneos (Ateneo Barcelonés y Ateneo Enciclopédico Popular) y se unió al partido comunista heterodoxo “Bloc Obrer i Camperol”, el antecedente del POUM. Dalí dibujó para su prensa y participó en mítines. Luego se hizo surrealista y más tarde, después de la guerra, ya sabemos cómo acabó.
       
                    10.- ¿Existe hoy un arte anarquista?
       
.-El arte si busca el compromiso, mantiene su ética y se mantiene libre puede llegar a ser anarquista; en cambio si cae en la demagogia o en el comercialismo no será otra cosa que un objeto al servicio de la cultura de masas. Actualmente existe el Kolectivo Consciencia Libertaria, que considera que los artistas son
revolucionarios por naturaleza y que el arte es un buen medio para propagar la anarquía. Son herederos de la filosofía artística del anarquista británico Herbert Read.
 
                 11.- Tú participaste en la refundación de la CNT. ¿Cómo ves la situación hoy en Catalunya?
 
        .- En general muy dormida, cada uno metido en su ghetto luchando contra los gigantes sin armas ni casi bagaje. Últimamente sé que ha habido contactos entre los diversos colectivos anarcosindicalistas (las dos CNT i la CGT) y otros movimientos alternativos de la ciudad. Una de las pruebas de esta nueva     sensibilidad fue la huelga del pasado mes de febrero. 
        
                 12.- ¿Crees que hoy día se ofrece a la CNT una segunda oportunidad para volver a adquirir el protagonismo que tuvo en los años treinta?
        
.- Vuelvo a repetir lo que ya dije al principio de la entrevista, a lo largo de la historia se han dado muy pocos momentos de gran movilización, el último fue el  año 1977, la CNT, que despegó bien, no pudo o no supo acabar de rematar la faena y esto le ha costado mantenerse a remolque de los acontecimientos durante muchos años. La situación mundial, la crisis económica y la falta de una     organización independiente de los partidos y del Estado hace de la CNT una   buena opción para conseguir rehacer los puentes caídos del movimiento obrero  para caminar hacia una sociedad más justa y más libre y sobre todo  autogestionaria.
 
              13.- ¿Qué se te ocurre para revitalizar una nueva sociabilidad? 

.- Primero que nada acabar con todo dogmatismo, pues considero que el dogma es el peor enemigo del anarquismo. Segundo rehacer el pensamiento utópico para enfrentarlo al pensamiento único. Tercero abrir un debate sobre la sociedad que queremos sin esperar a que suenen las trompetas del apocalipsis ni las de la gloria. Y finalmente invitar a participar en el proyecto a todos aquellos que creen  que otro mundo es posible.
        
            14.- Ferran ¿Nos regalas un poema tuyo?
 
- Bueno, pues te regalo un poema inédito escrito el pasado año, que lleva por título “El muro” como la canción de Pink Floyd:
        
        No queráis ser
        una piedra en el muro,
        no queráis ser
        esclavos del Capital,
        no queráis ser
        lacayos del Estado,
        no queráis ser
        nada más
        que vosotros mismos,
        libres y solidarios.
        Empezad el camino,
        abandonar la formación
        de los conformistas,
        poneros delante de la marcha,
        marcad vosotros el paso,
        ir siempre a la vanguardia,
        seréis los nuevos héroes
        dejaréis de ser esclavos.

    (Entrevista publicada a CNT, núm. 377, abril 2010)

Anarquisme / Artuto Borra entrevista Ferran Aisa

DIEZ PREGUNTAS SOBRE ANARQUISMO: UNA ENTREVISTA A FERRAN AISA

Arturo Borra

 

(Ferran Aisa)

1) Al menos en la Europa de la última década algunos movimientos sociales –tal como ocurre con el movimiento 15-M- han reactivado de forma más visible un cierto espíritu libertario. ¿Qué factores inciden en este retorno del anarquismo? De forma inversa: ¿por qué ese espíritu libertario no cuenta con apoyos sociales más amplios?

La situación política y económica actual es propicia para que se produzca la aparición de fenómenos de aspecto o movimiento social, como ya fueron los de signo antiglobalizador de los primeros años del siglo XXI, el movimiento Okupa y otros de signo más o menos libertario que han fomentado o fomentan aspectos como la solidaridad o el soporte mutuo. En este aspecto hay que añadir al movimiento 15-M, que ha puesto en su haber la práctica libertaria asamblearia. Que el anarquismo no haya desaparecido del planeta tierra es todo un fenómeno sociológico; a pesar de todo, el anarquismo, aunque sea en pequeñas dosis, continúa presente en el nuevo siglo. La falta de un apoyo social se debe sobre todo a la fuerza motriz del Estado y de sus soportes para combatirlo directamente de maneras muy sutiles basadas en calumniarlo o ignorarlo, incluso tergiversando los hechos históricos o la memoria colectiva. Por otra parte, la falta de una organización potente, dígase sindicatos o una coordinadora de movimientos sociales y libertarios, constituye el gran hándicap para encontrar apoyos sociales más amplios.

2) Admitamos que no hay garantías para la promesa de otro mundo posible. En esas condiciones de incertidumbre, ¿cómo movilizar a diferentes sujetos colectivos en la construcción de un porvenir deseado?

Las dificultades para crear un gran movimiento son muchas, pero la historia enseña que cuando las voluntades diversas quieren luchar para cambiar algo han de unirse, la fragmentación solo sirve para dar continuidad al sistema que se pretende derribar. Otro mundo es posible pero hay que construirlo desde el presente, creo que la movilización ha de pasar por tender puentes de diálogo entre las distintas maneras de pensar o de obrar con el fin de conseguir la construcción de un movimiento lo más amplio posible.

3) La frontera entre marxismo heterodoxo y anarquismo no siempre resulta nítida, aunque sus diferencias con respecto al estado son conocidas. En este punto, ¿qué puede aportar ese discurso marxista al movimiento libertario?

Las diferencias que existen entre el marxismo heterodoxo y el anarquismo, que son muchas, pueden limarse en la unión por la base, a través de la acción y la autogestión, por aquí se podría avanzar y ésta quizá es la aportación más clara que puede presentar el movimiento libertario. Es decir: un planteamiento de libertad y descentralización por encima de la autoridad y el centralismo.

4) ¿De qué forma podría concebirse la transición desde los actuales estados-nación a una sociedad sin estado, dando por sentado que los grupos hegemónicos ya despliegan todos los medios disponibles –sin excluir la violencia- para retener su régimen de privilegios? ¿Cómo se regularían los conflictos tanto en la vida pública como privada en esa sociedad autogobernada?

Romper la hegemonía de los Estados-Nación con sus poderes fácticos (nacionales e internacionales) es realmente una proeza de titanes, pero imperios igual de grandes han caído… En todo caso si existiese una transición hacia otra sociedad diferente de la actual se habría de tener en cuenta los valores libertarios, creándose colectividades de individuos libres. Las comunidades libres se tendrían que organizar bajo los preceptos de federalismo, apoyo mutuo, solidaridad y, entre otras cosas, autogestión. La regularización de los conflictos habrían de decidirlo las comunidades en su respectivo momento.

5) Uno de los reproches más repetidos con respecto a la izquierda es su dificultad de construir frentes de lucha en común. ¿Qué responsabilidades históricas tiene el anarquismo en la fragmentación de esos movimientos que buscan activamente una transformación social radical?

Todos los movimientos de izquierdas tanto marxistas como libertarios son responsables de sus victorias y de sus fracasos, que, en realidad, han sido también las victorias y los fracasos de la sociedad en pos de su emancipación. Para recuperar un movimiento unido o frente de lucha común quizá tendríamos que volver a los rasgos comunes de la Primera Internacional, anterior a la separación de Marx y de Bakunin.

6) ¿Por qué deberíamos renunciar a abrir un frente de lucha también (aunque no solamente) en las instituciones del estado, considerando que sus políticas nos afectan de forma directa? ¿Qué posibilidades reales hay de articular «representación parlamentaria» y «democracia directa»?

Las posibilidades de que un movimiento revolucionario de izquierdas o de signo libertario participen en los organismos del Estado no son sinónimo de garantía emancipadora, todo al contrario, creo que –como la historia demuestra- participar en la política burguesa significa quedar integrado en el sistema que se quiere destruir. Pero tampoco hay que olvidar que el anarquismo ibérico ya ha participado en el poder a todos sus niveles, en otras circunstancias claro, pero el fruto real conseguido fue contrario al anhelo revolucionario perseguido. También hemos visto como los partidos llamados de izquierdas (PCE-PSOE) cuando han llegado al poder no han hecho otra cosa que cejar en su ideología y dedicarse a apuntalar el Estado burgués.

7) Una lectura habitual de la célebre expresión “pasar del gobierno de los hombres a la administración de las cosas” es que ese pasaje equivale a una clausura de lo político, esto es, a una sociedad reconciliada, libre de antagonismos. En caso que resulte válida esa lectura, ¿hasta qué punto no se reintroduce un principio teológico en la historia humana, esto es, una dimensión mesiánica en la que el Otro es plenamente integrado a la comunidad?

Los planteamientos libertarios no son ajenos a la crítica, ni tampoco pueden librarse de contrasentidos porque son realizados por seres humanos. Nadie tiene la verdad absoluta, por tanto nadie puede monopolizarla para imponerla. Suponer que un mundo libre de poderes fácticos el ser humano sea capaz de constituir un gobierno que no gobierne sobre los hombres y mujeres, sino solamente se dedique a administrar las cosas sería el máximo exponente de anarquía. Pero de aquí a creer que esta célebre expresión tiene que ver con la fe o con aspectos mesiánicos me resulta difícil de responder. Considero que el anarquismo no es un dogma, sino un conglomerado de ideas y de conceptos que resultan más filosóficos que prácticos, por tanto en una hipotética sociedad libertaria, serían los individuos de las distintas colectividades o comunidades los que desarrollarían la política correspondiente para el bien común de la sociedad.

8) En algunas variantes ácratas, de modo similar a lo que ocurre en el liberalismo, la noción de «poder», circunscripta al estado, es concebida en términos negativos y represivos. Ahora bien, ¿qué implica desistir de toda forma de poder? ¿Qué puede hacer el antipoder ante poderes imperiales globales, despreocupados de la injusticia cotidiana y de la violencia que ejercen sobre millones de seres humanos?

El anarquismo es mucho más una ética de comportamiento, que no un compendio de instrucciones de organización social. Por tanto la ética o la moral anarquista, definida perfectamente por Kropotkin, considera toda clase de poder una obstrucción al libre albedrío de los seres humanos. La lucha contra el poder ha sido uno de los grandes objetivos  de los movimientos libertarios, así como la lucha contra la injusticia con el fin de concienciar a los individuos para avanzar hacia la emancipación. Por lo menos eso fue lo que se hizo en España mientras hubo un movimiento libertario popular encauzado sobre todo en la CNT.

9) La abolición de todo principio de jerarquía a menudo choca contra el reclamo de autoridad por parte de una subjetividad que con Guattari podemos denominar «capitalística». ¿Cuáles serían los espacios estratégicos fundamentales para cambiar esa subjetividad dominante y qué papel deberían jugar los intelectuales en este proceso de cambio?

Sabemos de las grandes dificultades que existen hoy en día para luchar contra las jerarquías autoritarias que dominan el mundo, y también del papel irrelevante que juegan los intelectuales en este proceso de cambio. Unos porque están a lado del poder que los alimenta, otros porque son silenciados directamente por la jerarquía autoritaria que domina el mundo. A pesar de ello los intelectuales de izquierdas, comprometidos o libertarios deben de buscar las vías propias para intentar llevar su mensaje no solamente a los “fieles”, si no saltar todas las barreras posibles, a través de todos los medios, para llevar su mensaje al resto de la sociedad.

10) La actual arremetida del capitalismo mundializado, facilitada por la institucionalización del estado de excepción, parece estar conduciéndonos a un punto de no retorno en el que el desastre ecológico y social es una posibilidad cierta, nada remota. ¿Cómo reinventar las luchas libertarias en el siglo XXI, considerando esta dinámica económico-política que nos enfrenta a una situación inédita en nuestra historia?

La fuerza del capitalismo globalizado actual con su ideología neoliberal y con su capitalismo salvaje, sólo puede ser contestada desde la unidad de acción de todos los movimientos que creen en un cambio radical y profundo del mundo. Díganse estos movimientos marxistas heterodoxos, libertarios, anarcosindicalistas, 15-M, etc. Precisamente las ocupaciones de plazas y el funcionamiento de las asambleas de barrio han venido a demostrar la viveza del anarquismo (aunque el adjetivo no se nombre) en sus valores fundamentales: Acción directa, solidaridad, federalismo, apoyo mutuo, autogestión y democracia directa. Todos éstos conceptos, en mayor o menor medida, se han aplicado (o aún se aplican) en la mayoría de las relaciones asamblearias del 15-M. Por tanto las luchas libertarias, por encima incluso, de organizaciones continúa viva en medio de la sociedad.

(Archipiélago en resistencia, Barcelona, enero de 2012)

Entrevista Ferran Aisa / Paper de Vidre

Paper de Vidre
 
Per Guillem Miralles, Tina Vallès i altres col·laboradors
 
«Els poders reals no han permès el desenvolupament de cap utopia que no fos la seva»
                                                                 Ferran Aisa

Entrevista a l'historiador Ferran Aisa
 

(Ferran Aisa en un acte al CCCB. Foto: Teresa Sanz)

Ferran Aisa:
Vaig néixer el 1948 a Barcelona, al número 6 bis del carrer de la Cadena (ara Rambla del Raval). Els pares eren també barcelonins, però els avis provenien per línia paterna de València i d'Aragó i per la materna d'Almacelles (Segrià-Lleida), per tant, sóc un fill genuí de la Corona d'Aragó. He treballat d'administratiu a una Gestoria, de pintor de parets a l'empresa familiar del pare, d'agent d'estadística, de llibreter, de comercial de l'Agrupació Mútua i de periodista al Diari de Barcelona, L'Avui, Diari Més i 20 Minutos. Durant la transició vaig militar a la CNT, i vaig ocupar el càrrec de secretari general del Sindicat de la Construcció i el de redactor del periòdic Solidaridad Obrera. El 1980 vaig entrar a formar part del Centre de Documentació Històrico-Social i vaig participar en la reconstrucció de l'Ateneu Enciclopèdic Popular, del qual vaig ser president els anys 1993-1998. He fet de documentalista d'exposicions, entre les quals destaquen: "Francesc Ferrer i Guàrdia i l'Escola Moderna"; "L'anarquisme ibèric (1868-1992)"; "Salvador Puig Antich i el MIL"; "Ateneu Enciclopèdic Popular, una entitat centenària"; "Salvador Dalí i Federico García Lorca, la persistència de la memòria"; i "Poetes en temps de guerra i revolució". També he escrit guions de documentals i he fet classes d'història de Catalunya. L'any 2000 va sortir publicat el meu llibre Una història de Barcelona, Ateneu Enciclopèdic Popular (1902-1999), que va guanyar el Premi Ciutat de Barcelona. Des d'aleshores he publicat uns quants llibres més: El laberint roig, V. Colomer i J. Maurín, mestres i revolucionaris; La cultura anarquista a Catalunya; La Internacional, el naixement de la cultura obrera; Contrarevolució, els fets de maig de 1937; Les avantguardes, surrealisme i revolució; Mestres, renovació i avantguarda pedagògica a Catalunya; a més de tres poemaris, Rambla del Raval, Calidoscopi i Terra de pas. I en col·laboració amb la meva companya Mei Vidal, Joan Salvat-Papasseit, l'home entusiasta; Camins utòpics, Barcelona, 1868-1888; i El Raval, un espai al marge.
 
PAPER DE VIDRE:
Només cal llegir l'apunt de dalt sobre la trajectòria de Ferran Aisa per adonar-se que ha aprofundit a bastament en l'estudi d'unes temàtiques que crèiem que s'adeien perfectament amb el tema de la revolució, protagonista d'aquest número de Paper de Vidre i que, per tant, ell podria ser l'entrevistat ideal per respondre les nostres preguntes. I veureu per les seves respostes que, tot i que explica moltes coses, encara podria haver-se allargat una mica més, perquè més enllà de la figura de l'estudiós hi ha l'apassionat per les temàtiques que ha estudiat.
Per a un tema tan ampli i susceptible de ser abordat des de diferents perspectives com la revolució, ens interessava especialment que les preguntes provinguessin de diferents persones, amb interessos i opinions diverses, per tal que les respostes d'en Ferran fossin més interessants. I creiem que les preguntes dels entrevistadors són especialment escaients i que han contribuït en bona mesura a fer especialment interessant aquesta entrevista que podeu llegir a continuació. 
EULÀLIA PETIT (Barcelonetes.com): Moltes revolucions (la francesa, la bolxevic...) al cap dels anys són vistes amb una nova perspectiva. Als sentiments de simpatia pel que han suposat d'ideals i d'implantació d'idees noves, es contraposen els coneixements i el raport dels estralls causats per la violència. Què penses d'aquesta dualitat: el revolucionari i la seva vessant idealista, positiva, d'home altruista i bo, d'una banda; i de l'altra, el revolucionari que imposa violentament, agressivament, totalitàriament les seves idees? Pots ajudar-nos a reflexionar sobre aquests dos aspectes del bé i el mal que potser duem ja a dins i que s'aguditzen tant en un moment revolucionari? Podria ser que de tan bons que volem ser siguem capaços de fer molt de mal?
FERRAN AISA: La revolució no és més que una ràpida evolució de la vida social que agita «violentament» les coses públiques i transforma la vida quotidiana. El seu fi és capgirar l'ordre establert per tal d'imposar un nou ordre social. Però cal tenir present de no confondre la revolució amb l'algarada i la revolta. El fet revolucionari es produeix quan el vell ordre ha estat enderrocat, aleshores arriba el moment de la construcció positiva. La violència revolucionària és fruit de la lluita social o de classes, però això no és la revolució, sinó una contestació dels revolucionaris contra la classe, casta o partit que domina el sistema que es vol enderrocar. En moments límits marcats per un cert caos és fàcil que la violència esdevingui un fet indiscriminat en mans de persones o grups incontrolats. Quan un fet d'aquestes característiques esclata és necessari implantar ràpidament l'ordre revolucionari que controli aquest desajust de la societat. Per una altra banda, hi ha la «no-violència», la qual no deixa de ser un fet revolucionari que es manifesta per mitjà de la desobediència civil o el pacifisme actiu amb l'objectiu d'acabar amb injustícies o amb sistemes opressors. L'ésser humà ha emprat la «no-violència» activa al llarg de la història des de Jesucrist fins a Gandhi o Martin Luther King i, fins i tot, a casa nostra tenim la mostra en Xirinachs. Però també hi ha l'altre extrem, que pot situar la violència en el nihilisme o l'anomenada propaganda pel fet que van fer servir molt sovint els revolucionaris i els anarquistes a finals del segle XIX. L'home rebel no fa la revolució, sinó que s'aixeca contra les injustícies i manifesta el seu descontent davant la situació arbitrària en què viu. Malgrat això, s'ha dit que la rebel•lió és un primer pas per adquirir la consciència revolucionària. Un teòric de la revolució com Joaquim Maurín manifestava que era més alliçonador el gest d'Espartac aixecant els esclaus contra el poder de Roma, que mil tractats de sociologia revolucionària. Alguns anarquistes com Reclus, Malatesta, Thoreau i Tolstoi consideraven que s'arribaria a canviar el món només per l'evolució de l'ésser humà, per mitjà de l'educació, la cultura i el pensament. Fins i tot consideraven que la revolució s'havia de fer dia a dia per mitjà del comportament ètic dels revolucionaris i de la creació d'una societat paral·lela a l'existent. Però la realitat ens ha demostrat que els afanys emancipadors sempre han xocat amb els propòsits repressors dels Estats i dels poders reals que no han permès el desenvolupament de cap utopia que no fos la seva. Així les principals revolucions que coneixem per la història vénen marcads per la violència... L'esperit roussounià de l'home bo és lluny de ser una realitat en un món víctima de les seves contradiccions. Superar aquestes contradiccions significaria haver aconseguit l'harmonia de l'home amb si mateix, amb els altres i amb la natura. Això crec que només seria factible en una societat lliure, solidària, igualitària i autogestionada. Una societat en què haguessin desaparegut les injustícies, les diferències de classe i funcionés per mitjà del suport mutu que aplica el lema: «A cadascú segons les seves necessitats.»
MEI VIDAL (escriptora, guionista i productora de TVE): És evident que és impossible fer una truita sense trencar un ou. La revolució, doncs, serveix en principi per accelerar o canviar la vida política, econòmica i social d'un país; ara, cal matisar de quina revolució parlem? Des del punt de vista històric en el fons totes són semblants, però, ho són realment?
FERRAN AISA: La revolució francesa per exemple va ser l'aixecament de les classes populars dirigides per la burgesia contra l'establiment monàrquic i l'aristocràcia que el mantenia. El triomf de la revolució francesa va significar l'auge de la burgesia com a nova classe dominant, mentre les classes populars (artesans, obrers, camperols...) quedaven novament arraconades. La lluita pel poder dins de l'Estat revolucionari francès va originar la imposició d'uns sobre altres pel terror. El resultat va ser la creació d'una república que, malgrat mantenir l'esperit dels programes de llibertat, ja no tenia res a veure amb la Revolució. D'aquí l'aparició de Napoleó i els afanys imperialistes d'imposar la «revolució» a altres pobles. Les classes populars van haver d'organitzar-se a part, sobretot amb l'aparició del proletariat, fill de la revolució industrial. Novament les idees de manumissió van aparèixer amb La Internacional i amb les línies ideològiques de pensadors com ara Marx i Bakunin. La Comuna de París va ser el darrer intent, després de la revolució francesa, de crear una societat de baix a dalt, basada en la cooperació, la solidaritat i la llibertat. La revolució soviètica, malgrat ser feta pel proletariat, és molt semblant a la francesa, però aquí en lloc de la burgesia la direcció va recaure en el partit bolxevic (o comunista) que va acabar convertint-se en una casta de poder. Per tant, la revolució del soviets o dictadura del proletariat poc va durar, ja que va prevaler la dictadura del partit i del mateix secretari general sobre el proletariat que havia fet la revolució. Al nostre país la revolució va ser de caràcter llibertari i popular, va ser una revolució constructiva que va canviar el sistema capitalista pel col·lectivista i va aprofundir els aspectes socials com la sanitat, l'educació i la cultura. Aquesta revolució va durar, més o menys, fins al maig del 1937, a partir d'aleshores es va tornar a reconstruir el vell ordre... Per últim, cal tenir present que l'esperit de Rousseau sobre el caràcter bo de l'home per natura és molt lluny de la realitat, i, en moments límits, poden aparèixer els odis i les ires ancestrals i convertir qualsevol persona en un criminal en potència i crec que d'això no se'n salva gairebé ningú. A més cal tenir en compte que, al nostre país, no solament hi havia una revolució en marxa, sinó una guerra contra el feixisme internacional. Malgrat això, tenint l'experiència del que va passar a Catalunya, la majoria de la població es va decantar per fer la revolució constructiva de la societat, però les bones notícies, des del punt de vista actual, no interessa difondre-les, al contrari, els fets delictius són enlairats al màxim per esborrar, d'aquesta manera, tot el que es va fer de positiu. Què se sap actualment de l'obra constructiva de la revolució espanyola?
JULIÀ DE JÒDAR (escriptor): La desaparició del concepte de revolució dins de la terminologia lligada a les perspectives alliberadores, només és conseqüència dels fracassos viscuts al segle xx o cal inserir-la en l'esgotament de l'horitzó intel·lectual inaugurat amb la modernitat, en la mancança de noves eines conceptuals per explicar els canvis que han donat lloc a les societats postindustrials?
FERRAN AISA: La paraula revolució, com tantes altres, ha estat segrestada per l'establishment. El capitalisme fa servir aquestes paraules com era revolució, solidaritat, autogestió, utopia, etc., per dir una altra cosa o per buidar-les del seu veritable contingut. La publicitat s'ha encarregat de fer-nos veure que un cotxe és revolucionari o que tal marca és solidària amb el tercer món. La caiguda de les ideologies amb el mur de Berlín va ser realment una llosa per a la paraula revolució, des d'aleshores la «revolució» la detecta el poder i, per mitjà de la «democràcia» i el neoliberalisme ha imposat el pensament únic i el mercat lliure. La societat, però, continua estant classificada entre dominants i dominats, els primers detecten el poder i decideixen per milions de persones, els segons només són (o som) «esclaus» feliços o infeliços de la societat de «benestar» o de «malestar», que els primers han dissenyat. Per tant, ara mateix, vivim sota una gran dictadura econòmica, social i cultural que pretén dir-nos que la història s'ha acabat, que les ideologies han fracassat, que l'únic pensament és el seu i que les utopies porten al desastre. Els intel·lectuals de la societat postindustrial no han de caure en aquesta trampa posada pels mandarins de la globalització. La crisi actual ha demostrat que l'Estat esdevé un col·laborador fidel del sistema i, sense pudor, acudeix amb diner públic a salvar-lo. Mentrestant milers de famílies i de persones queden abocades a l'atur, a la misèria, a la caritat... L'emancipació humana que tant lloaven els revolucionaris dels segles passats continua essent una causa pendent, la divisió del món entre dominants i dominats és un altre concepte a tenir en compte. El desenvolupament de la llibertat i de la solidaritat com a eines per encaminar-nos cap a l'autogestió de la societat està en els plantejaments del fòrums que proclamen que un altre món és possible. Per tant considero que la tasca dels intel·lectuals, dins d'aquesta era del buit en què vivim, és desemmascarar les trampes del sistema neoliberal per demostrar que l'ésser humà pot continuar avançant per la via de la solidaritat, del suport mutu i de la llibertat cap a un altre món on els valors preestablerts siguin uns altres. Tal vegada hauríem de tornar a plantejar-nos què vol dir revolució, què vol dir llibertat, què vol dir utopia... L'esgotament intel·lectual hauria de ser tan sols una parada en el camí per continuar caminant cap a l'horitzó..., però tenint present que la utopia no és a la fi del camí, sinó en el mateix camí. Així són les ítaques...
ISAKI LACUESTA (director de cinema): Comunista, capitalista, socialista... Totes aquestes paraules han estat sotmeses a un desgast considerable i hores d'ara tenen una lectura ambivalent, segons qui les faci servir. En canvi, i malgrat les obres d'escriptors com Chateaubriand i Arenas, el mot revolucionari continua ressonant sempre amb un dring positiu. És, inequívocament, un elogi. Perquè la paraula revolucionari resisteix tan bé en l'imaginari col·lectiu?
FERRAN AISA: La paraula revolució ha tingut sempre una bona acollida en una gran part de la societat, perquè representa una esperança, un mot de canvi, malgrat que ara mateix només ho sigui en l'aspecte imaginari. La revolució i els revolucionaris encara mantenen una aurèola romàntica, filla del segle XIX, un segle realment impressionant que va engendrar pensador com ara Marx o Bakunin i, naturalment, molts altres. El poder s'ha dedicat a desgastar la paraula o a segrestar-la, i la publicitat s'ha dedicat a fer-la servir com a adjectiu d'avantguarda dels productes de consum. La utilització d'imatges, per exemple, de Mao o de Che Guevara, en anuncis publicitaris, no serveix més que per desvirtuar la realitat i convertir aquests revolucionaris en productes al servei d'interessos capitalistes. Hi ha revolucionaris que tenen bona premsa una vegada morts, recordem el cas de Salvador Puig Antich, mentre vivia gairebé ningú no va fer res per salvar-lo. Això també passa amb les ideologies revolucionàries: només són tractades, més o menys, quan ja no hi ha «perill» que ressorgeixin. Però cal anar en compte, si mirem la propaganda actual sobre la guerra civil espanyola veurem que tot el mal recau sobre l'anarquisme i, sobretot, sobre la FAI. Ells són els dolents de la pel·lícula mentre els seus aliats durant la guerra, actualment al poder, es renten les mans com Pilats. Si mireu arreu veureu que la paraula revolució només és als llibres d'història, actualment només la fan servir a Cuba, precisament un país on hi va fracassar ja fa molts anys. En els temps de la globalització s'usen altres paraules per denominar la revolució, tal vegada per no confondre els objectius de canvi amb velles idees d'antuvi. Malgrat això, la paraula revolucionari ha resistit el pas del temps com una imatge necessària per a l'imaginari col·lectiu, ja que la majoria de les persones viu en un món que no li agrada i, tal vegada, voldria ser revolucionària per canviar-lo. Però com deia la cançó no són bons temps per la a lírica, ni per ser revolucionari, ni per ser heroi.
MARTÍ SALES (escriptor): Què en penses dels moviments llibertaris contemporanis amb base a la xarxa, organitzacions com ara nodo50 o indymedia? Creus que Internet ha esdevingut una eina indispensable per a la construcció d'alternatives a tots nivells?
FERRAN AISA: Tot el que sigui positiu per iniciar camins, projectes o alternatives benvingut sigui. Les noves tecnologies poden fer una gran servei a la comunitat tant d'informació com de formació. La immediatesa és un fet important, sobretot en el nostre món global, però cal tenir en compte que al segle XIX, sense Internet ni telèfon, el proletariat va ser capaç de construir La Internacional. Això ho dic perquè crec que molta gent creu que la vida ha començat ara mateix, i, en canvi, molts dels drets de què gaudim han estat aconseguits per mitjà de la lluita dels nostres antecessors. Els moviments llibertaris, en el cas que realment tinguessin pes, haurien d'estar a tot arreu, no solament a la xarxa informàtica, sinó a la vida real com ho van estar anteriorment. Tant abans de la guerra civil com a la revolució i, fins i tot, durant la transició. Els anys setanta que vaig viure plenament abocat a la reconstrucció d'aquests moviments, sense cap experiència, els joves vam posar en marxa la CNT, els ateneus llibertaris, revistes, editorials, ràdios lliures, etc. Gairebé tot se'n va anar en orris, ara no cal dir per què, seria molt llarg d'explicar, però l'essència d'aquells moments tal vegada l'han recollida diversos col·lectius com els okupes o els que naveguen per la xarxa a nodo50 o indymedia. Ara caldria veure si tota aquesta lluita alternativa es tradueix realment en una nova força de pensament i d'acció capaç de crear un moviment d'alternatives a tots els nivells. I quan dic a tots els nivells em refereixo tant a crear des de centres culturals com a constituir empreses autogestionàries.
MARTÍ SALES (escriptor): Tinc tendència a pensar que els nivells d'ignorància, apatia i inèrcia en la història de la humanitat no han fluctuat gaire i sempre han estat molt elevats. Creus que és així o que estem en una època particularment adotzenada -o particularment activista?
FERRAN AISA: Si parlem de la història de la humanitat al llarg dels segles, sempre hem vist com els que detectaven el poder imposaven no solament la seva força, sinó també la seva creença. Només una minoria era ensinistrada en les arts, les lletres i el saber. La immensa majoria de la població no anava mai a escola. El monopoli de l'educació normalment estava en mans de l'Església i els únics que hi anaven a aprendre alguna cosa eren els fills de la noblesa. Posteriorment es van obrir escoles per als fills de la burgesia. Però les primeres escoles, anomenades de minyons, no es van posar en marxa fins a finals del segle XVII. Per tant era normal que les classes baixes visquessin en una profunda ignorància. La majoria de la població era analfabeta i, per tant, entre una cosa i l'altra, molt fàcil de ser manipulada pels quatre pilars del poder: estat, exèrcit, església i burgesia. La revolució industrial va crear, per una banda, el patró o capitalista, i per l'altra, el treballador. La brutal explotació i les condicions infrahumanes en què vivien els treballadors van ser el detonant que va encendre la metxa de la consciència obrera. Els pensadors socials van enlairar les seves teories emancipadores i els nous corrents socials es van organitzar creant associacions de defensa. L'obrer conscient va convertir-se en proletari i, aleshores, sabent la seva condició d'explotat, va aixecar la seva bandera de rebel·lió contra el sistema injust que el condemnava a la misèria absoluta. L'obrer organitzat sabia que el poder disposava d'una arma que ell no tenia, la instrucció, per tant, des de la creació de La Internacional es va posar en marxa la constitució d'ateneus i escoles per ajudar a la formació dels obrers. No hi ha cap congrés obrer del segle XIX o de més tard, del primer terç del segle XX, com també la creació d'escoles lliures que van des de l'Escola Moderna de Ferrer i Guàrdia fins a les escoles racionalistes de la Segona República. Per tant, crec que l'ésser humà, sobretot de les classes baixes, va fer un gran avanç contra l'apatia i la ignorància en els dos darrers segles, cosa que li va permetre mantenir en peu el seu esperit de consciència. El punt més àlgid d'aquesta consciència va ser durant la revolució del 1936-1937, en què els treballadors van col·lectivitzar els serveis públics i els mitjans de producció; i van organitzar una societat al marge de l'Estat tradicional. Les dures derrotes del proletariat, els exilis, les repressions i les desmemòries van portar l'antic proletariat al sac negre de la història. Malgrat que durant el final del franquisme i la transició hi va haver un tímid despertar d'aquesta consciència, novament, ja fos amb el desencís o amb el pas del temps tot va quedar en un miratge. La situació de la societat actual marcada per l'individualisme i la insolidaritat no ha fet res més que crear ignorants «il·lustrats», perquè a diferència dels proletaris del segle XIX, ara no hi falta ni escola, ni universitat ni informació.
JORDI QUER (editor): Políticament, literàriament, què van aportar les Terres de Ponent a la revolució catalana? És un mite que els joves immigrats del camp a la ciutat de Barcelona passaren a engrossir sovint les files més contestatàries i radicals?
FERRAN AISA: L'aportació lleidatana a la política i la cultura catalana és prou important, només cal veure d'on procedia el president Companys, fill del Tarròs, o en quin lloc va iniciar la seva carrera política Macià, a les Borges Blanques. Tampoc cal no oblidar la presència important de lleidatans en el moviment obrer català, començant per Salvador Seguí El Noi del Sucre i acabant per Víctor Colomer, el darrer alcalde republicà en funcions de l'Ajuntament de Barcelona. Joves de Ponent van col·laborar en la creació de l'Associació Escolar Republicana que va dedicar-se, a primers de segle, promoure la cultura entre les classes baixes i a fomentar el catalanisme. Aquí cal parlar d'Humbert Torres, que fou el primer alcalde popular de Lleida i diputat al Parlament d'ERC. Torres i el seu company Perenya van col·laborar amb Layret, Companys, Zulueta i altres a fomentar l'Extensió Universitària per a Obrers a Barcelona. Altres joves arribats de Ponent van militar tant en el camp llibertari com en el marxista, però, sobretot van tenir un paper important en la creació del Partit Comunista Català (PCC) i, poc després, del Bloc Obrer i Camperol. Hi van destacar Víctor Colomer, Jordi Arquer, Pere Bonet, Ardiaca i, fins i tot, Joaquim Maurín que, fill de Bonansa-Osca, va fer de mestre al Liceu Escolar de Lleida i fou el secretari de la CNT lleidatana. Durant la República una gran part dels militants d'esquerres lleidatans que vivien a Barcelona van formar part del POUM i altres del PSUC. També hi va haver destacats militants de la CNT com l'aragonès Felipe Alaiz, que havia estat mestre del Liceu Escolar i militat en l'organització confederal lleidatana. Va ser molt important l'aportació dels mestres de Ponent que van anar a parar a les escoles del Patronat Escolar barceloní i que van mantenir una gran activitat durant la guerra en l'organització del CENU: Dolors Piera, Teresa Vilasetrú, Josep de Tàpia, Frederic Godàs Vila, Víctor Colomer... També en el camp de la cultura trobem els germans Xuriguera (Joan Baptista, Ramon i Pau), tots ells membre del POUM, col·laboradors de l'Ateneu Enciclopèdic Popular i autors de novel·les. De els comarques lleidatanes, concretament de Balaguer (La Noguera) hi trobem la presència destacada en plena guerra de la jove Teresa Pàmies, militant de la JSU i fill de l'històric militant comunista Josep Pàmies. Resumint, Barcelona va saber atraure els joves amb inquietuds de la resta de Catalunya, però, amb una especial decantament cap a les organitzacions d'esquerres dels lleidatans. Acabada la guerra a Catalunya la majoria d'aquests polítics, mestres i escriptors lleidatans van haver d'emprendre un llarg exili, molts d'ells ja no hi van tornar mai més.
JAUME AUBAREDA (editor): Al marge de la teva faceta com a assagista, conrees també la poesia. Parla'ns una mica de la teva obra poètica.
FERRAN AISA: Vaig començar a escriure poesia quan tenia disset o divuit anys, en principi no n'era conscient que feia poemes, ja que jo el que volia fer eren lletres de música pop. Abans dels vints anys ja havia escrit alguna lletra en català emulant als autors de la nova cançó, Raimon, Serrat, Llach. A partir dels vint anys ja em vaig adonar que feia poemes, la majoria d'ells (escrits en castellà) encara són inèdits. El canvi de to va ser degut a la meva passió per la lectura i per descobrir la veu dels poetes. Així vaig començar a llegir els poetes castellans Bécquer, Machado, García Lorca, Hernández, León Felipe, Neruda, Goytisolo, Gil de Biedma, i els catalans Pere Quart, Riba, Maragall, Carner, Vinyoli, Salvat-Papasseit, Foix, Espriu, Ferrater, Bartra, Rosselló-Pòrcel, Andrés Estellés, Martí Pol..., i els estrangers Elliot, Hikmet, Mallarmé, Corso, Rimbaud, Kavafis, Pavese, Pessoa... Tots plegats i molts altres van ajudar-me a omplir el meu sarró poètic. Naturalment si hi ha un poeta que ha tingut un pes més decisiu en la meva obra no és un altre que Salvat-Papasseit. A l'època d'estudiant nocturn de peritatge mercantil, amb uns companys lletraferits van crear una grup literari que organitzava tertúlies i ens intercanviaven els escrits. Però la nostra tasca literària restava completament inèdita. No vaig començar a publicar fins la a transició, crec que seria a finals del 75 o del 76 que per primera vegada vaig veure un poema meu publicat en una revisteta que es deia Fulls Acràtics. A partir del 77 els meus escrits i alguns poemes apareixen publicats a Construcción, un butlletí de la CNT; i, durant les Jornades Llibertàries Internacionals de Barcelona, vaig publicar, amb Pep Castells, un recull de poemes en una mena de fanzine. L'any 1980 vaig entrar a formar part de l'Ateneu Enciclopèdic Popular, des d'on vam col·laborar en la creació de la Secció Literària, que organitzava diverses activitats com ara tertúlies, exposicions, conferències, homenatges, recitals poètics i publicava la revista El Vaixell Blanc. En els trenta números de la revista hi tinc publicats diversos escrits literaris i nombrosos poemes. La publicació també es va dedicar a crear una humil col·lecció poètica, l'any 1986 hi vaig publicar els dos primers reculls, un en català i l'altre en castellà: Arran de mar i Todo el fuego sobre el mar. Fins a 1990 que va finir la col·lecció en vaig publicar algun altre. Més tard l'any 1998, les edicions del Grup León Felipe en publicava Raval, memòria poètica i el darrer any del segle apareixia La caixeta del Van Gogh, editat per El Dau d'Ivori. Precisament amb aquest grup liderat per Adolfo Castaños vaig participar en nombrosos recitals poètics a Barcelona i rodalies. Ja en el nou segle he publicat tres poemaris: La Rambla del Raval, Calidoscopi i Terra de pas. El primer recull és una constant d'un dels meus principals imaginaris, el barri del Raval, els seus carrers, els seus terrats, la seva gent, tot allò que només és memòria perquè la història que mai s'atura s'ho ha empassat. La sensació, la tendresa, la passió, l'amor, la utopia, el somni... El record dels que ja no hi són. La poesia i l'art han de saber enlairar-se per sublimar, transcendir i, si és necessari, retornar-nos la bellesa segrestada per fer més agradable la vida. Calidoscopi és una mostra de versos publicats a la revista El Vaixell Blanc, en altres opuscles o totalment inèdits. Tots ells són versos escrits el segle XX, des dels anys seixanta fins els darrers noranta. En canvi, Terra de pas, el meu darrer llibre, es va començar a gestar a les portes del nou mil·lenni i representa la meva incursió, novament, a l'amor, la utopia, el somni, el temps que passa, la terra en què vivim i, finalment, un canvi d'espai, doncs del Raval i de Barcelona, passo a recórrer les terres de Ponent, les terres dels meus avantpassats materns, la terra de la Mei... D'aquets recull s'ha dit que continua havent hi la presència de Salvat-Papasseit, però ara ampliada amb Màrius Torres o Maria-Mercè Marçal i, sobretot, i al meu parer, també el Pavese de Lavorare Stanca.
ANNA CARRERAS (escriptora): Els títols que recullen la seva poesia (La rambla del Raval, Terra de pas, Univers i Calidoscopi) són itineraris, microcosmos i macrocosmos que impliquen límits, moviments i reaccions. La revolució poètica és expressió en paral·lel a comunicació. A través de la lògica retrospectiva (record) i de la lògica prospectiva (somni) de l'art, considera que es pot reaccionar contra l'estancament estètic i forjar una poètica de ruptura?
FERRAN AISA: Els corrents poètics que més m'han interessat són els que marquen un ritme de trencament. Crec que això es pot aconseguir des de l'exploració tant dels sentiments com dels afanys col·lectius. De vegades s'ha dit que la meva obra poètica és un cant generacional, sobretot els versos del Raval, el poeta Adolfo Castaños, al pròleg d'El Raval, memòria poètica, va dir: «Cualquier poema de Ferran Aisa -aunque en mayor medida unos más determinados- es un acto de notario poético de un tiempo y una circunstancias, que trata con delicadeza y precisión casi femeninas, porque el susurro y el fluir es más importante en él que los grandes gritos y la convenciones -aún las más nobles de ellas. Y lo que para más es de agradecer: todas esas referencias, toda esa memoria fértil que suda sus versos, es conjugada con un latir propio y personal por el que canaliza y devuelve convenientemente el hilo de la memoria, con su propia huella.» El també poeta i crític literari David Castillo, al pròleg de Rambla del Raval, diu: «Descendent de Salvat, Ferran Aisa recull els sons i els sorolls del carrer i els incorpora a uns versos que fan aroma de mel i farigola, que evoquen la nit de Sant Joan i que ens ensenyen els carrers del seu barri, avui devastat per la Rambla del Raval que dóna títol al poemari. (...) També hi ha un cant generacional, el record dels tristos i emocionants dies de l'anomena Transició política, que tants somnis i malsons va dur. (...) Més que un cronista històric o periodístic, Ferran Aisa es més importants del nostre temps, com ara Vicent Andrés Estellés o Maria Mercè Marçal.» Finalment l'historiador i poeta Xavier Díez, sobre Terra de pas, escriu: «Si Salvat-Papasseit hagués arribat a seixanta anys, probablement seria com Ferran Aisa: optimisme indestructible i confiança, contra tota evidència, que les utopies són encara possibles.» Bé, he volgut fer aquest incís sobre la meva obra poètica abans d'acabar de contestar aquesta pregunta. La revolució poètica sempre va paral•lela a la revolució transformadora de la societat. En certs moments de la història els revolucionaris són poetes en acció, només cal recordar a Durruti quan liderava la seva columna de milicians i va ser entrevistat per un periodista canadenc i l'anarquista va clamar: «Las ruinas no nos dan miedo. Sabemos que no vamos a heredar nada más que ruinas... (...) Pero, le repito, a nosotros no nos dan miedo las ruinas, porque llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones y ese mundo está creciendo en este instante.» Això és poesia en acció..., poesia revolucionària. L'art al llarg de la història ha passat per moltes etapes, la majoria d'elles ha caminat de la mà del poder, ja fos l'Església o la burgesia. L'art per l'art, que s'ha tornat a imposar després de l'època de les Avantguardes, no és més un espectacle per la societat de consum. L'art revolucionari (incloc la poesia) en canvi pretenia (o pretén) incidir en la vida quotidiana de les persones per canviar el seu comportament social. Des d'aquesta perspectiva es volia forjar un moviment de ruptura que baixés l'art i la poesia a peu de carrer i es passegés entre la gent. Les avantguardes artístiques i literàries van abandonar les torres d'ivori per posar-se al costat de la causa popular. Aleshores l'art i la poesia van esdevenir acció revolucionària... Albert Camus va analitzar perfectament aquesta qüestió artística: «La poesia rebel de finals del segle XIX i començament del XX va oscil·lar constantment entre aquests dos extrems: la literatura i la voluntat de poder, tant irracional com racional, el somni desesperat i l'acció implacable.» La memòria i el somni, doncs, són completament compatibles per construir un imaginari poètic «revolucionari», que, per mitjà dels versos, esdevingui un motiu pels sentiments humans, però també per la ràbia i pel somni utòpic.
CARLES HAC MOR (escriptor): A tu, oh Ferran!, a qui de fet no conec personalment, que vas fer d'home anunci nihilista (que reclamava «No res. Res de res. Absolutament no res») en un «Cabaret Voltaire» de fa molt, no et sembla que ara, com sempre, caldria no pas fer himnes AL no-res, sinó pensar -sense anunciar-los- en els himnes DEL no-res, amb el benentès que, en voler transformar les coses, és precisament aquesta voluntat (que traeix el no-res) la que fa que res no es transformi, potser per sort, i tot plegat vist sota la convicció -mantinguda per tothom, inclòs jo, amb tota la impostura del món- que qualsevol activitat cultural neix d'una intenció putrefacta, i que aquest origen, de tan engrescador com és, ens fa mirar de mal obrar (els carrinclons en dirien crear, i els benpensants provocar) com qui desconeix l'influx permanent i vitalitzador del no-res?
FERRAN AISA: Oh, amic Carles! Recordo perfectament el Cabaret Voltaire de l'any 85 com un fet innovador dins d'una Barcelona amorfa i putrefacta, una ciutat dominada pel seny gris del poder manipulador i totalitzador dels mandarins polítics, periodístics i culturals. L'esperit dadà hauria de tornar a agafar empenta dins del món artístic i cultural per dinamitzar-lo i crear novament esperits revolucionaris des de l'art, des la vida i des del no res. Ja ho va dir Tzara i també Picabia, dadà no és res, dadà no vol res, dadà no vol absolutament res. Però aquesta negació per mitjà de l'acció esdevé un clam revolucionari, ja que dadà ho vol capgirar-lo tot. Tal vegada a aquesta pregunta li aniria bé contestar-la amb el fragment del poema «Art», d'un llibre encara inèdit: «(...) Per un moment una mosca i la poma que em vaig cruspir abans de llançar-me / al vuit dels meus cinc o sis sentits van resultar còmics i fins i tot absurds, / res que objectar, vaig meditar profundament i em vaig fer un embolic, / total per res, absolutament res: RES! RES! / Doncs, no som res, com els dadaistes, res de res... / (...) Per allà passejava Tristan Tzara dadaísticament parlant i a la vegada plovia al menjador. I l'aigua ballava al compàs dadà d'una rima trencada, incompleta / com una profunda realitat marcida als llavis d'una verge en estat de gràcia, / plena de saviesa o com un arbre de grans branques al mateix desert del Sahara. / (...) Ah, i l'absinti content ballava frenèticament amb les roselles de la primavera, / era l'hora roja la tarda quan vaig rebre la benedicció papal, / però cansat de tanta mentida, vaig agafar un taxi i em vaig llançar al mar / dels despropòsits deixant la meva herència als banquers.»
GUILLEM MIRALLES (Paper de Vidre): Hi ha un cert acord a qualificar l'obra poètica de Joan Salvat-Papasseit com una de les més brillants de la literatura catalana, malgrat que fou estroncada per una mort molt prematura, i amb la contribució de diversos cantants (Joan Manuel Serrat, Ovidi Montllor, Lluís Llach, Casasses-Comelade...) que han musicat poemes seus, l'han ajudat a fer popular. La seva prosa tanmateix, és bastant desconeguda. La recent publicació de l'Obra Completa a Galàxia Gutenberg ens ofereix aquests escrits en prosa. Què creus que aporta Salvat-Papasseit en quant a temàtica i estil a la prosa catalana?
FERRAN AISA: Salvat va ser sobretot un poeta, fins i tot quan escrivia prosa, perquè estava tocat per la vareta dels grans ideals. La seva prosa castellana fou escrita quan era molt jove, només amb vint anys era capaç d'escriure textos com «Humo de fàbrica», en què diu: «Salían lentamente de la fábrica y yo leí sus odios y sus buenos amores, su hambre y su miseria. Y así leí también que eran los productores, aquellos desdichados. Y me junté con ellos, porque su aspecto era de bondad y dulzura y porque son el símbolo, por ese padecer, de la evolución firme y creadora. Mientras las chimeneas humeantes dibujaban cabezas de rabias comprimidas y de angustias y muertes: Era la gran visión humeantes dibujaban cabezas de rabias comprimidas y de angustias y muertes: Era la gran visión de la terrible nube que traerá la lluvia, la tempestuosa lluvia que les libertará. La lluvia que es la masa que lo produce todo y carece de todo. Aún me fui bendiciéndoles por aquella tragedia de sus vidas, porque les hará dueños de todos los destinos de la tierra: -Cada uno que muera en la lucha sublime por un mejor mañana, producirá en su tumba a ras de tierra una rosa de fuego que consumirá un mundo de injusticias. Así sea.» Salvat-Papasseit és un perfecte fill del seu temps, home d'extracció proletària, orfe de pare, tancat en un orfelinat al port, àvid d'aprendre, gran lector, amant de la Kultura... El primer terç del segle XX va ser un moment de gran ebullició en tots els sentits i la joventut va prendre part en aquesta lluita per canviar les coses. Això sí, començant per canviar-se ells mateixos, doncs, la revolució ha de començar per canviar les persones i assumir des d'ara mateix l'ètica i els valors del món que vol construir. Salvat-Papasseit, com tants joves de la seva època, va seguir aquesta aspiració de voler canviar el món... Paral·lel als escrits de Salvat podem veure també els d'altres joves d'aquell temps com ara Andreu Nin o Joaquim Maurín i veurem que els anhels de justícia i de llibertat formen part dels seus articles. La prosa revolucionària de Salvat, que en alguns aspectes està marcada pel pensament anarcosindicalista o el llibertari, és completament regeneracionista. Les lectures de Gorki, Kropotkin, Ibsen o Costa queden ben reflectides en els seus escrits. Salvat no solament denuncia fets concrets, sinó que intenta ser educador de les «masses» i pretén regenerar els vells vicis humans. Per tant no és estrany que blasmi contra la burgesia, però que, a la vegada, també ho faci contra els treballadors... Salvat era capaç d'agafar el fuet «literari» per agitar-lo contra la joventut conformista: «¿No conocéis Un enemigo del pueblo, de Ibsen? Debierais conocerle, pues yo también lo soy, a la usanza de aquél, y así, cuando os insulte y os maltrate, no os caerá en extrañeza. Los jóvenes de España sois un hato de eunucos y de imbéciles, un hato de cobardes. Hay que hablaros así para que reaccionéis. Esta es una nación que vegeta en el fango y que se duerme en él; vosotros sois el fango. Un incesto monstruoso, del cual sólo saldrá -como del parto vil de una infame aristócrata- un pingajo de pus, que eso es lo que os corroe las entrañas.» Salvat-Papasseit molt ràpidament va passar a la llengua catalana i ho va fer a través dels versos i també dels escrits a la premsa o dels manifestos o dels contes a les filles. La seva prosa aporta a la literatura catalana una veritable frescor que no es troba en els seus contemporanis, malgrat que, pels problemes de la seva formació intel·lectual i per la seva extracció social, no va estar mai reconegut del tot pels poders literaris, Salvat aporta, sense dubte, les més interessants pàgines literàries de l'avantguarda catalana.
GUILLEM MIRALLES (Paper de Vidre): Actualment hi ha un viu -i a vegades polèmic- debat a l'entorn del model d'escola que es vol en el qual hi participen mestres, polítics, pares i mares, periodistes, etc. Quan se'n parla, es contraposen diferents models i es parla de recuperar els valors de l'autoritat i l'esforç, que suposadament s'haurien perdut pel camí i que, ben aplicats, haurien de conduir als alumnes cap a un millor aprenentatge. Després d'escriure el llibre Mestres, renovació i avantguarda pedagògica a Catalunya, creus que hi ha algun valor més que no es té en compte en aquest debat, probablement perquè aquest sí que suposaria un fort canvi de model, i que contribuiria també a estimular els nens cap a la curiositat i l'aprenentatge? Quins van ser, en la teva opinió, les grans innovacions dels moviments pedagògics de la II República que van ser estroncats per l'adveniment de la Guerra civil?
FERRAN AISA: Crec que el problema fonamental, com en tantes altres coses, rau en no haver fet un canvi realment rupturista durant la transició. D'altra banda, els mestres progressistes, que van voler construir una escola contrària radicalment a l'escola autoritària franquista, han acabat perdent l'horitzó... Ara gairebé ningú parla de quin és l'objectiu de l'escola? Preparar els alumnes pels graus superiors? Formar persones? Infondre valors democràtics? Motivar els alumnes a ésser carn de canó de la societat capitalista? Difícil papereta la dels nostres educadors. Amb el meu llibre Mestres... he volgut explicar la gran lluita que van portar a terme els mestres, des del segle XIX, per dignificar la seva professió. També he volgut enlairar l'ètica dels mestres alhora de promoure els valors, entre els seus alumnes, de llibertat, de solidaritat i de suport mutu. Valors que eren completament formatius per les diverses fornades d'alumnes, especialment, de la República. La idea de l'educació com eina emancipadora va ésser promoguda per l'escola llibertària, a través d'experiències derivades de l'Escola Moderna de Ferrer i Guàrdia a les escoles racionalistes. La renovació pedagògica que va viure Catalunya a partir de l'etapa de la Mancomunitat va permetre l'aparició de mestres d'una gran categoria humana, que van desenvolupar la seva tasca tant en escoles pilot o en els Grups Escolars de l'Ajuntament de Barcelona. Amb alts i baixos, sobretot motivat per la dictadura de Primo de Rivera, amb la implantació de la Segona República i el restabliment de la Generalitat, l'escola va prendre un gran impuls de la mà de gestors i mestres, que consideraven l'educació com una de les millors eines per ajudar a canviar la societat. La guerra va arribar quan ja s'estava incorporant a l'ensenyament català les principals experiències pedagògiques que podríem dir d'avantguarda dels Ferreri, Decroly, Dalton, Montessori, Freinet... A nivell de l'estat espanyol també s'havia avançat amb la recuperació de l'ètica educativa de la Institución Libre de Enseñanza de Giner de los Ríos. Tot plegat havia convertit l'ensenyament en un dels principals (per no dir el principal) puntals de la República. L'inici de la guerra, en principi, no va acabar amb aquest esperit a la zona republicana, tot el contrari, es va multiplicar considerablement els anhels d'aprendre, ja que en la nova societat que s'estava construint tothom havia d'estar preparat per ser gestor i obrer a la vegada. Les escoles, malgrat els mals de la guerra, van viure els seus millors moments a Catalunya amb la constitució del CENU (Consell de l'Escola Nova Unificada), sistema educatiu que recollia les principals corrents pedagògiques, tant les llibertàries com la dels pedagogs avantguardistes. El resultat d'aquest nou sistema escolar va ser l'establiment de l'escola activa, és a dir, una escola participativa. La victòria franquista sobre la República va significar l'arrasament de totes les experiències que s'havien fet a Catalunya durant els darrers trenta anys i, aleshores, imposaven una escola autoritària, marcada per la difusió dels valors del règim (pàtria, caudillo, gestes heroiques espanyoles, etc.), el catolicisme ultramuntà i, en lloc de la reflexió, la memorització. Naturalment, tot explicat en la llengua de l'Imperi. Doncs, crec jo, que, una vegada acabat el franquisme, els nous gestors educatius democràtics no han sabut trobar encara el programa més adequat per l'ensenyament actual, portant, aleshores, tant els mestres com els alumnes a la desmotivació per una falta real d'objectius. Tal vegada s'hauria d'obrir de nou un gran debat en què només hi hagués una pregunta: Quin és l'objectiu de l'escola dels nostres dies?
TINA VALLÈS (Paper de Vidre): «L'any 2004 els diaris es feien ressò de la descoberta de restes arqueològiques al solar de l'illa Robadors, en el lloc on hi ha prevista la construcció de la Filmoteca, pisos de protecció oficial i un hotel de luxe. L'edifici, tot de vidre, en forma d'el·lipse, s'il·luminarà des de dins com un far... Un viatge des de Blade Runner fins al temps més remot de la ciutat.» Aquest fragment és extret del seu llibre El Raval. Un espai al marge, escrit a quatre mans amb Mei Vidal (i publicat per Base el 2006). Ara, al 2009, qui passi per la Rambla del Raval ja pot veure aquest hotel de luxe que al 2004 tan sols era un projecte; un hotel d'aspecte bladerunnerià que contrasta amb l'entorn ravalenc de balcons, roba entesa i façanes que no han gaudit d'una subvenció Barcelona-posa't-guapa. Situar-se al mig de la Rambla del Raval, just en aquest punt i mirar a una banda i a l'altra és ser espectador de les dues cares del Raval: la que ven l'Ajuntament i la que vivim els veïns. Quan hi passo, em pregunto: què deuen pensar els hostes de l'hotel quan veuen per la finestra de l'habitació els edificis mal conservats i plens de vida de l'altra banda de la Rambla? I, sobretot!, què els deu passar pel cap als que des del seu balcó-traster i atapeït de roba estesa veuen aquell edifici postmodern i exageradament il·luminat cada dia del món?
FERRAN AISA: L'hotel cilíndric de l'illa Robador és una mena de nau extraterrestre en mig del Raval. Qualsevol dia d'aquests sortirà com un coet cap a l'espai amb tots els turistes al seu interior... Ara també acaben d'inaugurar molt a prop la plaça Manolo Vázquez Montalbán, què hagués pensat l'escriptor del Raval d'aquest hotel i el seu entorn? Crec que, seguint el seu costum, ho hagués criticat, doncs, tal vegada pensés que li havien robat part del seu imaginari. Del vell Raval queda molt poca cosa, sí, naturalment moltes cases i molts carrers, però, la vida avança... A mi m'han enderrocat la casa on vaig néixer, el taller del meu pare al carrer Sant Rafael, l'imaginari... Acabaré recordant el poema de Rambla del Raval, 
«Somnis trencats»:
Somnis trencats de la infantesa,
mites adolescents cavalcant
damunt d'un núvol blanc,
lliures com els vents,
lliures i adolescents
d'aquell Raval
de carrers estrets
i vells cinemes,
petites illes
on descobríem
el món màgic del somni
d'un Alan Ladd pistoler solitari
a cavall per les valls i els turons,
d'aquelles terres llunyanes,
-Shane, no te'n vagis...
I, encara, altres mites adolescents,
amb Robin Hood a Sherwood,
lluitant a favor dels pàries / i oferint la vida
per l'amor de Lady Marian.
Oh, el capità Blood, corsari dels mars,
disfressat d'Errol Flynn,
amb l'espasa a la mà,
assaltant vaixells!...
I l'illa del tresor
on tots els pirates
trobaven el seu paradís.
Ah, la bandera negra dels pirates,
amb un parell d'ossos i una calavera,
en el pal més alt del meu vaixell!
Ai, el meu vaixell:
el meu terrat,
el meu somni trencat!
SANTI SOBREQUÉS (editor): Quines són les teves previsions de publicació i els teus projectes per a l'any en curs?
FERRAN AISA: Entre els projectes que estan a punt de materialitzar-se, és a dir, de ser editats, hi ha un estudi sobre l'Ajuntament de Barcelona durant la guerra civil, coeditat conjuntament pel Servei de Publicacions de l'Ajuntament de Barcelona i l'Editorial Base. Entre els projectes immediats hi ha un treball que he escrit sobre els recitals poètics a Barcelona durant els anys de la guerra, que publicarà l'editorial mallorquina Lleonard Muntaner i, actualment, estic treballant amb la Mei Vidal en la preparació de la segona edició de la biografia de Joan Salvat-Papasseit. També tinc en marxa un assaig sobre la utopia...
 
(Paper de Vidre núm. 51, 23 de febrer de 2009)

Entrevista Ferran Aisa / Carlus Jové

Entrevista a Ferran Aisa
 
Carlus Jové
 

(Coberta: La cultura anarquista a Catalunya de Ferran Aisa)

Ferran Aisa és un autor prolífic, capaç de publicar varis llibres en un sol any. Entre els seus últims treballs publicats hi trobem El Raval, un espai al marge (Base, 2006), escrit conjuntament amb Mei Vidal o La cultura anarquista a Catalunya (Edicions de 1984, 2006). És precisament en motiu de la publicació d’aquest darrer que vam entrevistar-lo aprofitant la seva vistita al II Festival Desviat a Camallera. L’obra d’Aisa inclou diversos estudis al voltant del tema cultural llibertari, com Joan Salvat-Papaseït, l’home entusiasta (Virus, 2002) o Una història de Barcelona: l’Ateneu Enciclopèdic Popular (1902-1999) (Virus, 2000), llibre pel qual el 2001 rebé el premi Ciutat de Barcelona. Ha participat en vàries obres conjuntes, i també és autor d’alguns guions de documentals de caire històric.
La cultura anarquista a Catalunya sintetitza la història d’un moviment polític de masses en la seva vessant més social i cultural, mostrant que l’arrelament de les organitzacions llibertàries no tan sols es produï en el terreny del conflicte social o sindical, sinó també en els aspectes més quotidians de la vida, així com també en els més elevats, que fins aleshores havien quedat limitats a l’abast d’uns pocs privilegiats.
 
Pregunta: Perquè un llibre com aquest?
Ferran Aisa: Considero que és un tema que no ha estat prou tractat, ja que la majoria d’estudis sobre anarquisme són o bé molt genèrics, o bé molt concrets sobre naturisme, urbanisme o altres temes. Però un llibre amb una visió global de la cultura anarquista, que en un sol volum oferís una panoràmica del que va representar aquest moviment, crec que no existia.
P: En els últims mesos hi ha hagut un “boom” de la memòria històrica. S’està fent justícia amb el moviment llibertari?
FA: No del tot. Per exemple, es fa una memòria molt global de la Guerra Civil o la República, però el pes tan important que va tenir l’anarquisme en aquells moments no queda ben reflexat. Sobre tot queda molt amagada la tasca cultural i pedagògica de l’anarquisme a principis del segle XX, la qual va ser molt important.
P: Al final del llibre fas una afirmació molt contundent: “L’oblit va caure com una llosa sobre la cultura llibertàira, les seves realitzacions van ser esborrades per la història dels vencedors i també pels historiadors marxistes. (...) Els vencedors sabien que eliminant l’anarquisme ja ningú parlaria de l’emancipació humana.”
FA: És una de les realitats del moviment llibertari, la història del qual ha estat tergiversada, silenciada, amagada; les seves realitzacions durant la guerra, com les col•lectivitzacions és quelcom del que gairebé no se’n parla, o la seva trajectòria pedagògica a través de l’escola racionalista i els ateneus. En canvi si que es parla de coses que no hi tenen masa a veure. Tot el moviment associatiu de cooperatives, ateneus és quelcom bastant desconegut.
P: Un dels elements interessant del llibre és que destapes que molts dels artistes de vanguarda a Catalunya havien flirteigat amb l’anarquisme...
FA: Les vanguardes tenien un component revolucionari, i entre els seus membres alguns van tenir tendència marxista, trotskista, però també una part important d’ aquesta avantguarda va tenir aquesta relació amb l’anarquisme. A principis de segle, per exemple, el moviment dadaísta, va tenir una tendència molt llibertària, mentres que el surrealisme fou sempre més vinculat al marxisme i, posteriorment, al trotskisme, referint-nos sempre als seus components. Tot aquest moviment genera una vinculació de la gent de les lletres i l’art amb el que anomenàven “la causa popular”, que era la revolució, i aquesta relació es prolonga fins a 1939 d’una manera molt clara.
P: En els nostres dies, podem encara percebre l’herència d’aquest moviment tan bast?
FA: La cultura anarquista ha quedat molt difuminada dins la societat, i en podem trobar elements a moviments feministes, ecologistes, situacionsites o el mateix moviment okupa, tot i que no sempre es declarin llibertaris. Però són elements que han quedat en aquests moviments. El moviment cultural específic, de massa, ha quedat endarerit degut a la situació política que tenim i també per l’estat del propi moviment anarquista, que ha quedat en un segon terme. No obstant això, té un paper molt important a jugar en el món actual, perque de la manera com avança la societat, el llibertari és un pensament (el considero un pensament,, i no tant una ideologia) que aporta forts elements contraculturals. Als 60, per exemple, és un moment en que reapareix el pensament llibertari. A través del maig francès, del món dels hippies i la música pop s’origina la idea de llibertat total, sense límits, i això genera una contracultura. Aquesta contracultura pot tornar a sorgir, ja que l’èsser humà sempre tornarà a sommiar en crear noves societats; és el somni igualitari. Cal crear un pensament utòpic davant el pensament únic, i aquí pot tornar a resorgir un pensament llibertari.
P: Tu formes part de l’Ateneu Enciclopèdic Popular, una de les entitats vinculades a l’anarquisme amb més història. Quina tasca dueu a terme?
FA: La seva missió continua essent la que ha tingut sempre: divulgar la història i la cultura i posar-la a l’abast de la gent. Des de la seva fundació s’ha preocupat per expandir la història i la cultura, que no quedés recluida en quatre parets, i això es fa a través de publicacions, xerrades i altres medis. És el que ha fet i el que continuarà fent. Donar a conèixer la història del poble, el seu poble.
 
Carlus Jové
(Catalunya, 2 de febrer de 2007)

Fets de Maig de 1937/ Francesc Valls entrevista El País

AMB MOTIU DEL 75È ANIVERSARI DELS FETS DE MAIG DE 1937 REPRODUEIXO L'ENTREVISTA FETA PER FRANCESC VALLS A FERRAN GALLEGO I FERRAN AISA SOBRE AQUELLS FETS HISTÒRICS I QUE FOU PUBLICADA PER QUADERNS D'EL PAIS EL 3 DE MAIG DEL 2007

ELS FETS DE MAIG DE 1937 

FRANCESC VALLS

El 1937, ara fa 70 anys, els carrers de Barcelona es van omplir de barricades fraticides entre antifeixistes

Ferran Aisa i Ferran Gallego a la plaça de Catalunya

El maig de 1937, ara fa 70 anys, va pujar una glopada agra a la gola de la Barcelona revolucionària. Anys acumulats d’injustícies, ambicions de poder i fam de revolta van acabar en lamentable indigestió política per a les classes populars que havien der­rotat el feixisme el 19 de juliol de 1936. Entre el 3 i el 7 de maig, mentre les tropes republicanes es batien contra la reacció, els carrers de la capital catalana es van omplir de barricades. Els antifeixistes es mataven entre ells: 500 morts i més de mil ferits. A una banda de les barricades els militants d’Esquerra Republicana i el PSUC; a l’altra, sectors anarquistes (Joventuts Llibertàries i els denominats Amics de Durruti) i el Partit Obrer d’Unificació Marxista.

El microcosmos republicà català en­trava en erupció, després que el 3 de maig les forces dirigides per Eusebio Ro­driguez Salas, comissari d’ordre públic, assaltessin l’edifici de la Telefònica a la Plaça de Catalunya de Barcelona, en mans de la CNT, força hegemònica de la classe obrera catalana. El comunistes he­terodoxos del POUM demanen alesho­res la formació d’un Front Obrer Revolu­cionari, esperant fer la revolució a la rere­guarda contra PSUC i ERC. La CNT, majoritàriament, crida a la pacificació. Així ho fan des de Joan Garcia Oliver a Frederica Montseny per evitar que les columnes anarquistes donin mitja volta des del front i enfilin cap a Barcelona. Els anarcosindicalistes deixen d’aquesta ma­nera sols i ai1lats a uns poumistes

La crisi arrenca del control de l’ordre públic, segons l’historiador Ferran Gallego, quan, al març del 1937 , es dissolen les patrulles de control i la CNT abandona el Govern de la Generalitat en no aconseguir fer-se amb el comandament de les forces policials. Sobre la societat catalana pesen excessos i barbàrie, el paradigma dels quals són els Fets de la Fatarella de gener del 37.

Per a l’historiador Ferran Aisa, el maig de 1937 marca el declivi de la Rosa de Foc, nom que els anarquistes donaven a Barcelona. Acaba aquell miratge que Orwell descriu al Homage to Catalonia: la ciutat que tuteja, vesteix granota i om­ple de gom a gom el Restaurante Gastro­nómico Colectivizado Número 1, nom amb què es coneixia l’altre temps selecte Ritz. Per a Aisa, la CNT cedeix massa. Per a Gallego, s’adequa a una societat que majoritàriament no és llibertària. El resultat és un maig roig de sang amb el trencament de la unitat antifeixista, la il·legalització del POUM i l’assassinat del seu màxim dirigent, Andreu Nin.

Barricada a la Rambla el maig de 1937

Dues visions i uns sols Fets

Dues visions sobre els Fets de Maig van dialogar fa uns dies a la redacció bar­celonina d’El País. Aquest és un extracte del debat as­sossegat que van mantenir els his­toriadors Ferran Gallego (Barcelo­na, mayo de 1937. Debate, 2007) i Ferran Aisa (Contrarevolució. Els Fets de maig de 1937. Edicions de 1984, 2007).

Ferran Aisa. Els fets de maig de 1937 signifiquen el trencament de la unitat antifeixista. La guerra o la revolució ja no evolucionaran tal com ho havien fet des de finals del juliol del 36. La revolució deixa d’estar en primera línia i guanya terreny la guerra, amb la burocratització de l’administració. Torna una mica al vell ordre, el d’abans del 19 de juliol de 1936. El maig és l’esclat d’una cosa que es covava des que es va suprimir el Comité de Milícies, però sobretot des de desembre de 1936, quan co­mença l’atac contra el POUM per part dels estalinistes.

Ferran Gallego. Estic d’acord amb qué els fets de maig suposen un moment de ruptura, però amb la resta tinc cordials discrepàncies. Primer, la Guerra Civil era espa­nyola i la correlació de forces no era la mateixa a Catalunya que a Espanya. El POUM fora de Cata­lunya pràcticament no existia. En segon lloc, crec que la guerra intro­dueix un canvi amb el que havia estat la República i fins i tot el Front Popular. La victòria sobre la insurrecció feixista va comportar una dinàmica revolucionària amb diverses opcions. Una d’elles, al camp marxista, és la que defensa el POUM, que no és la del Front Po­pular. El POUM és crític des del dia després de la victòria electoral amb el Front Popular, tot i que anava a les seves llistes. El partit que lidera Andreu Nin planteja su­perar la fase democràtica i passar a la fase socialista fins i tot abans que esclati la guerra. L’altra posició és la d’aprofundir amb les propostes del Front Popular i con­vertir el que havia estat una aliança electoral amb una cosa que anava molt més enllà: una coalició de tot allò que era anti­feixista, incloent-hi les forces no obreres com podien ser ERC, o el partit d’Azaña, o alguns sectors de la dreta del PSOE que podien ser de classe mitjana, etc... l haig d’afe­gir que el POUM i la CNT no plantegen la mateixa estratègia. Al desembre de 1936 passa una cosa fonamental a Catalunya: el POUM deixa el Govern i la CNT es queda.

Pregunta. És quan es fa el que podríem dir govern sindical...

F.G. Si la CNT no hagués vol­gut, el POUM no hauria deixat el Govern. També deixa el Govern el PSUC, el que es queda al Govern és la UGT, el PSUC se’n va, la FAI se’n va... Realment el perdedor és el POUM, perquè ERC, sent un partit, es queda. l és que la CNT considera ERC una espècie de sin­dicat de la classe mitjana. El POUM es queda sol.

F.A. El POUM deixa el Govern perquè el PSUC l’està atacant des d’octubre, dient-li feixista...

P. Sembla que l’estratègia del POUM veiés Catalunya com una realitat aliena a Espanya?

F. A. Aquesta simulació d’Estat independent es trenca el maig del 1937.

P. La CNT, als Fets de Maig del 1937, opta per la via de la conciliació amb el Govern de la Generalitat. Deixa sol al POUM. La majoria del sindicat hegemònic decideix no tren­car amb el Govern de la Generalitat. La CNT, el 19 de juliol, es fa amb el control del carrer i es posa a les or­dres de la Generalitat i al maig de 1937 aposta per la pacificació i res­pecta novament la Generalitat.

F.A. En principi també es po­dria pensar que la CNT accepta una Generalitat revolucionària el 1936. La majoria de la direcció aposta per mantenir la unitat.

F. G. Però la CNT manté la Generalitat.

F. A. La Generalitat legalitza el que fa el Consell de Milícies Anti­feixistes. Jo crec que serà l’estalinis­me el que trencarà la unitat i s’acabarà el moment de màxima independència que ha tingut Cata­lunya des de 1714.

F.G. Amb els Fets de Maig perd Catalunya, perquè el general Pozas assumeix l’ordre públic i la defensa. Però de tota manera la pregunta és: era realment possible fer la revolució a Catalunya?

F.A. No sé què hagués passat...

F.G. Crec que era inviable al marge del que succeïa a l’espai republicà en el seu conjunt. A més, ERC, PSUC i UGT no volien anar per aquesta via.

F.A. La CNT busca la unitat amb partits republicans. El POUM és minoritari i s’esforça per arrossegar la CNT i crear un govern revolucionari. Però la CNT no anava per aquest camí. Estava més al costat d’ERC, del PSUC que del POUM.

F. G. Si m’ho permets, jo crec que la CNT no estava al costat d’ERC en el seu conjunt sinó del sector de Tarradellas, que creu que contra els anarcosindicalistes no es pot actuar. En canvi Companys pensa que sí es pot actuar. Tarrade­llas té una estratègia que parteix de la relació habitual que ha tingut ERC amb la CNT. El subjecte obrer a Catalunya era la CNT i ERC era el subjecte classe popular. Companys es decideix en un altre sentit. El 25 i 26 de gener de 1937, el moment en què passen els fets de La Fatarella, el fan canviar.

P. La CNT abandona el POUM.

F.G. L’abandona ja al desem­bre. La CNT té la idea que el POUM és un altre projecte, que vol instaurar la dictadura del prole­tariat. Aquest plantejament que no se’l fa mai l’anarquisme, que parla sempre de la necessitat de comptar amb el catalanisme polí­tic, amb el federalisme.

F.A. De l’any 1937, passats ja els Fet de Maig, hi ha una entrevis­ta bastant llarga en un diari a la dirigent anarquista Federica Mont­seny. Li pregunten quina Espanya és la que creu que tindran una ve­gada vençuts els feixistes. Ella diu que serà una Espanya socialment avançada, on hi haurà un govern de tipus popular, on no s’estarà en el comunisme llibertari: "Això so­bretot no cal que us ho penseu", diu. La gent de la CNT coneix per­fectament què és el POUM: sap que són els que han intentat captar des de sempre.

F.G. La CNT té una cosa que sempre em resulta curiosa. Sense tenir la petulància ocasional dels marxistes, té olfacte per analitzar la correlació de forces. Ells diuen: "nosaltres no podem fer la revolució llibertària perquè no hi ha una majoria llibertària en aquest país"... l en canvi, curiosa­ment, el POUM, que té una teoria marxista molt més científica, sent una minoria política fa a l’inrevés. CNT i POUM lluiten tàcticament junts, però no estratègicament. La prova és que en el moment en què han de negociar com s’acaben els fets de maig, el POUM no està assegut al Palau de la Generalitat amb els dirigents del PSUC o amb el president Companys. La CNT, el dia 3 de maig, ja li diu a Nin: "Escolta, nosaltres no hem sortit per prendre el poder".

Barricada a la Rambla

P. Els Fets són un punt i final a les col·lectivitzacions

F. G. El decret de col·lectivitza­cions el signa Tarradellas, ERC, i no només perquè té la pistola de la CNT dient-li "firma", sinó segura­ment perquè la petita burgesia d’ERC ja hi estava d’acord, amb el decret, i la Unió de Rabassaires també. Vist tot això, ens atreviríem a dir que el POUM són els obrers i el PSUC són classe mitjana?

F. A. No, jo crec que no. Tant el POUM com el PSUC neixen del mateix, de la classe obrera catalana. l per tant, de la CNT.

P. Un tronc comú per acabar-se titllant de tot i disparant-se pels carrers...

F. A. El que no s’entén molt és que coneixent-se tots, a partir de cert moment, el PSUC, seguint ordres del Partit Comunista o de la Internacional Comunista, ata­qui la gent del POUM i dient que són feixistes...

F.G. Jo el que no puc entendre és per què alguns trotskistes es­panyols es queixaven d’això quan els seus correligionaris van fer exactament el mateix amb els anarquistes de la Unió Soviètica. L’assassinat de Nin és ignominiós com ho és la qualificació del POUM com a partit de la Gestapo. Però també és ignominiós que el POUM acu­si els comunistes alemanys de KPD o els integrants de la Briga­da Abraham Lincoln de venir a fer la contrarevolució a Espanya.

F. A. La contrarevolució l’es­tant fent amb la seva política els partits comunistes.

F. G. Quina contrarevolució?

F. A. Acabar amb el sistema. Per a mi la revolució es perd no sola­ment pels atacs que hi pugui haver del Partit Comunista, sinó també pels errors de la CNT d’anar ce­dint, anar cedint...

F. G. No anar cedint. Analitzar una correlació de forces i dir: Escol­ti’m, jo aquest objectiu final no el puc aconseguir. L’única manera d’aconseguir-ho és trencant el front antifeixista i, per tant, l’espai republicà. O no? La CNT no està cedint, està arribant al compromís que implica tota lluita contra el feixisme. Aquest és l’element nou que Nin no té en compte, perquè la Revolució Russa no lluitava contra el feixisme. Durruti diu en una en­trevista que li fa Kolsov: "El més important és guanyar la guerra".

F. A. I afegeix: "S’ha de fer una guerra revolucionària"...

F. G. Tothom està fent una guer­ra revolucionària!

F. A. No sé si tothom, eh? Les col·lectivitzacions d’Aragó van ser destruïdes!

F. G. Quan vols, estàs a Catalunya i quan vols, saltes a Aragó.

F. A. En aquell moment, Aragó depenia de Catalunya.

P. Parlem de les conseqüències. Podem dir que aquí l’estalinisme va portar els processos de Moscou a Barcelona amb la repressió del POUM i l’assassinat d’Andreu Nin?

F. G. Crec que, evidentment, no és una casualitat que el gran procés contra els trotskistes del 1937 coinci­deixi amb uns titulars a Mundo Obrero que fan tremolar. No es pot tractar de feixista a un sector del moviment comunista. També fa tre­molar quan Nin tracta els reformis­tes de defensors del capitalisme, com si no hi hagués cap diferència entre un senyor de la CEDA i un senyor del PSUC. És extraordinària la pèrdua de la raó d’uns i altres. A part, hi ha la imat­ge mítica i influent de la Unió Soviètica desembarcant aquí amb men­jar, etcètera... És l’únic país que ens està ajudant.

F.A. Però com és que aquí no arriben mai les armes?

F.G. Perquè si no haurien anat a parar... Home... (riures) No em facis contestar que les haurien fet servir contra l’Hotel Colón (seu del PSUC). Per això no els les donen. Jo crec que passa això i deixen d’enviar armes, com sabeu pel llibre d’Àngel Viñas, quan veuen que els tancs i els avions russos russos estan sent destruïts pels alemanys. Stalin deixa d’en­viar-los perquè els necessita per defensar el seu país...

F. A. Jo crec molt que Stalin li tenia jurada a Nin. Com que Trotski era l’enemic número u i Nin havia estat amb Trotski, eren enemics de la Unió Soviètica. A part, Stalin no volia permetre a l’Europa occidental que hi ha­gués un partit que tingués èxit al marge del seu, que era el Partit Comunista.

Francesc Valls

(El País – Quadern, 1210 / 03-05-07)